No
les ha pasado que todos los que están a su alrededor se empiezan a enfermar de
gripe y ustedes dicen: “NO, yo no me voy a enfermar” y al día siguiente
despiertan sin poder respirar porque, hay algo en sus narices que les impide
hacerlo, y se dan cuenta que ese algo es…si, ¡MOOOOCOOOOO! ??
En
fin, eso me pasó a mí. En Monterrey ya está “refrescando” un poco, bueno bueno,
ya está un poco más agradable, ya no amanece con los riquísimos 34°C (sarcasmo
al decir riquísimo) como hace un mes. Y nada más se asoma una nubecita en el
cielo y ya todos están estornudando, hasta pareciera que somos alérgicos al
frío.
Y
como si fuera poco que me haya contagiado de gripe, Dios decidió también
quitarme el internet, no sé si fue un castigo divino o que Slim estuvo jugando
otra vez a quitar y poner los servicios de Telmex. Ya me imaginarán, sentada en
mi banco del colegio, con mi voz gangosa y con el moco escurriéndose en plena
clase de anatomía. ¡PERO! Fuera de eso, creo que mi semana no ha sido tan fea,
terminé un libro que tenía mucho leyendo, hice mis tareas y hasta me dormí
temprano, todo gracias a que no tenía internet.
Lo
horrible de todo esto es que: 1 ° No duermes a gusto, te despiertas en plena
madrugada buscando el paquete de Kleenex porque ya no puedes respirar. 2°
Tienes que entretenerte con, con… ¡CON NADA! No hay nada interesante que hacer
y no te queda de otra que convivir en familia, está bien, ignoren eso último.
3° Tengo que auto-medicarme, está bien, no me auto-medico, solo tomo pastillas
que me quitan el dolor articular y la fiebre que me hace soñar cosas raras, y,
hablando de soñar cosas raras, el viernes que llegué mi casa del colegio, era tanta mi pereza que
me dormí sin haber comido antes, ya se imaginarán, soñé con platillos
exquisitos y ¡DIOS! Casi muero ahí, sino es que me desperté para hacer algo de
comer, ya saben: ¡PASTA! Y, otra cosa 4° Cuando estás enferm@ de gripe y que,
aunque inhales profundamente, ¡NO HUELES NADA! Puede pasar un zorrillo frente a
ti, y no te darás cuenta. O sea, es como si te hubieran cortado la nariz,
y peor que eso, puedes estar comiendo un
pastel delicioso, y a lo único que te sabe es a cartón, literal, no encuentras
la diferencia entre un manjar y un pedazo de madera.
En
fin, dejaré de quejarme de éstas cosas, y mejor iré a embarrar otro lugar,
aparte del teclado, con mis mocos.
Gracias
por leer.
Rc.
Dato
curioso. Cuando estoy mocosa, soy la persona más negativa que puedan conocer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario